Durante la noche, Shellie Williams y su madre Betty avistaron unos extraños objetos voladores. Enseguida se pusieron a grabar con la cámara de su mobil y vieron que los ovnis disparaban unos rayos de luz rojos hacía el suelo. "Fue una experiencia extraña y yo tenía miedo" declaraba Shellie.
Las misteriosas imágenes fueron filmadas desde una embarcación en la ciudad portuaria de Bristol, Inglaterra.
Al dia siguiente, las mujeres denunciaron el suceso a la Policía, y el control del tráfico aéreo del Aeropuerto Internacional de Bristol dijo que no había informes de esta "actividad inusual".
Al dia siguiente, las mujeres denunciaron el suceso a la Policía, y el control del tráfico aéreo del Aeropuerto Internacional de Bristol dijo que no había informes de esta "actividad inusual".
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